Excel es un software fundamental para muchas empresas. Millones de personas usan esta hoja de cálculo para procesar datos numéricos y de texto, para registrar bases de datos, generar facturas, realizar operaciones automáticas y más. El elemento resaltante de este programa es que se pueden generar varios tipos de macros que ayudan a ahorrar tiempo, ser más prácticos y productivos.

¿Qué son los macros y para qué sirven?

Una macro es una acción que se realiza de forma automatizada cada vez que se active el atajo preestablecido. Sirven para que se ejecuten varias tareas sin necesidad de ejecutarlas manualmente.

Si tu trabajo en Excel significa hacer diariamente varias tareas, con una macro puedes ahorrar mucho tiempo al indicarle al programa cuáles tareas hacer y en qué orden. Estas tareas son personalizadas, según lo que has grabado.

Para crear una macro deberás configurar un atajo (con teclas o clics) y proceder a realizar las tareas mientras se graba la macro.

La opción Macro se encuentra en la sección “Vista” y “Macros”, allí verás la opción “Grabar macro”. Todo lo que hagas a partir de que comiences a grabar el macro, lo podrás guardar. Cuando necesites hacer exactamente lo mismo, tendrás que pulsar el atajo que escogiste y el programa hará lo mismo que hiciste.

Tipos de macros

Macros de funciones: son las macros en las que se graban acciones. Estas se pueden modificar, copiar de un módulo a otro, copiar macros entre libros y más.

Macros de comandos: son macros que llevan guardados argumentos que indican qué hacer con un conjunto de datos en determinada función de Excel. En otras palabras, este tipo de macro significa personalizar y optimizar las formulas preestablecidas en Excel.

Ventajas de una macro

Con las macros ahorras tiempo al no tener que crear cada tarea manualmente, una tras otra.

Las macros harán que tengas menos errores al hacer las acciones que necesitas. Como debes programar las tareas, tendrás la oportunidad de verificar que estén correctas, y una vez que lo estén, las puedes ejecutar con una macro cada vez que las necesites.

Tu productividad aumentará ya que, mientras Excel ejecuta las tareas con una macro, podrás hacer otras actividades.