Oraciones con nombres posesivos
Los pronombres posesivos son definidos como aquellos que ejercen la función de reemplazar al sustantivo, indicando la pertenencia del sujeto, como, por ejemplo: nuestras, mi, tus y sus.
Es decir, estos pronombres son los que vinculan o relacionan al poseedor con lo poseído y tienen como propiedad que pueden ser singulares o plurales, usados en primera, segunda o tercera persona. Como, por ejemplo: esa bicicleta es mía.
Los pronombres posesivos, además, son términos usados para referirnos a cosas que nos pertenecen a nosotros o a otras personas. Representan una gran utilidad en las conversaciones rutinarias enriqueciendo el idioma. También sirven para mencionar cosas que poseemos, ya que cada pronombre posesivo posee una estrecha relación a un pronombre sujeto.
Diferencias entre pronombres posesivos y determinantes posesivos
Los determinantes posesivos son aquellos que se colocan antes del sustantivo para modificar, ejemplo: “mi perro”. Por su parte, los pronombres posesivos en idioma español se colocan después del verbo principal que existe en la oración, ejemplo: “la cartera es mía” y “el perro es suyo”.
En ambas oraciones, tanto la palabra mío como suyo, son pronombres posesivos que se colocan después del verbo SER. Otra diferencia que se puede acotar, es que generalmente los pronombres posesivos tienden a usarse con frecuencia después de algunos artículos definidos, tales como “El y La”.
Su utilidad es relevante, porque hace referencia a una determina persona u objeto, como, por ejemplo: “Su primo es simpático. El mío también”.
Género y número de los pronombres posesivos
En el idioma español, los pronombres posesivos llegan a afectarse debido a las reglas referentes al número gramatical y al género de los sustantivos, ya que su forma requiere concordar con el sujeto al cual se refieren. Ejemplo: “La cartera es mía”.
Este es un sustantivo femenino singular, para lo cual requerimos un pronombre que posea las mismas características, es decir, mía o suya. Ello se usa tanto para el singular como para el plural.
Oraciones con pronombres posesivos
- Esa computadora es mía.
- Nuestros amigos vendrán mañana a la fiesta.
- Yo no uso lo tuyo porque siempre te enojas.
- En esa universidad estuvimos nuestros mejores años.
- ¿Qué dicen vuestros primos del viaje?
- Esos juguetes no son míos, son suyos, pídeselos prestados.
- ¿En qué podemos invertir nuestro dinero?
- Pregúntale al profesor si ese carro es suyo.
- En vuestra casa siempre rezan para comer.
- Esa porción de pizza que tomaste, era mía.
- Que lápices tan bellos, ¿son vuestros?
- No tengo ningún recuerdo suyo.
- En América y específicamente en nuestro país, las personas se saludan con un beso, en el vuestro se dan dos.
- Ese saco que está en la tienda, se parece mucho al tuyo.
- ¿Es vuestra abuela de nacionalidad polaca?
- ¡Todo lo mío es tuyo!
- Todas nuestras comidas son recomendadas para aquellas personas que requieren de una alimentación sana y ligera.
- Todos sus alumnos, le prepararon a la profesora una fiesta sorpresa para celebrarle su cumpleaños.
- El evento ocurrido el día domingo por la tarde, fue responsabilidad nuestra.
- Todos esos cuadros que están colgados en tu casa son míos, los pinte cuando estudiaba pintura en la academia.
- Me pareció muy prudente y mesurada la idea suya y reconozco que no es mía.
- Esa pelota negra y blanca que me encontré en el parque ¿es tuya?
- La velada estuvo muy agradable, vuestros abuelos son muy simpáticos y educados.
- Estoy segura de que esas llaves que estaban en tu escritorio son mías.
- Me encantaría que nuestros hijos asistieran a un colegio bilingüe, de esta manera se prepararían para sus estudios superiores.
- Cuando vayas al parque, te recomiendo que ates tu bicicleta con candado.
- Me gustaría saber si esos retratos que están en la mesa son tuyos.
- Me fascina vuestro auto, es rápido y confortable.
- Esas monedas que vistes en la mesa del cuarto, no son mías.
- Me encantaría saber dónde iremos en nuestras próximas vacaciones.
- Los zapatos rojos que viste en el estante no son míos, son suyos.
- Estamos preparando una celebración para nuestro aniversario de bodas, ya que queremos ir a cenar a un restaurante que acaban de inaugurar.
- Esa cabaña que se ve allá en el pico de la montaña ¿es tuya o de tus padres?
- Debemos reconocerlo, mi pantalón es casi igual al tuyo.
- Las costumbres de nuestros ancestros siempre fueron muy particulares, muy diferentes a las nuestras.
- Esto va con Pedro y María, ¿qué queréis que os regalemos para vuestro casamiento?
- Estoy plenamente segura, de que la maleta que se quedó en el aeropuerto era la suya.
- Preparamos toda esa comida, porque dijiste que tus amigas vendrían a cenar.
- Es importante estar pendiente de nuestros hijos, ya que son pequeños y pueden perderse.
- Es obvio, que vuestras hermanas son gemelas, porque son idénticas.
- Nos divertimos mucho con la música, porque nuestros padres se enamoraron en un concierto de rock.
- El jardín de nuestra casa es muy espacioso y tiene plantas que le sirven de adorno.
- Carlos en su discurso estuvo muy conmovedor, ya que dio a entender que su tristeza tenía mucho que ver con la infancia suya y la de su hermano.
- Mi primo, siempre ha sido un excelente guitarrista, todas esas guitarras que ves ahí son suyas.
- Mi amiga Natalia, me obsequió para navidad ese rompecabezas que tienes en tu cuarto, por lo tanto, es mío, no tuyo.
- La profesora solicitó que anoten en una hoja cuáles son sus expectativas para el año en curso.
- Vuestra familia tiene pocos miembros, la nuestra es incontable.